‘No me quiero morir’: grito de rescatista de Coahuila; antes de morir de COVID-19
La socorrista ya presentaba síntomas cuando cuidó a su suegro quien al parecer estaba contagiado
Monclova, Coah.- Gran madre, esposa, hermana, hija, amiga, así era Miriam Cantú Camarillo, quien a pesar de la distancia sostenía una fuerte unión con sus padres y sus hermanas que viven en Laredo, Tamaulipas, así lo dijo Daniela Cantú Camarillo, hermana de la paramédico fallecida la noche del lunes por Covid-19 en Monclova, apenas 20 días después de que falleció su suegro Jesús Miguel Llanes, a quien ella cuidó los últimos días y que aparentemente también estaba infectado.
Miriam era muy alegre, de hecho tras su fallecimiento las personas que han escrito sus condolencias en su Facebook mencionan que siempre van a recordar su sonrisa.
Su infancia la vivió en Laredo junto a sus padres don Héctor Cantú y doña Magdalena Camarillo, así como con sus dos hermanas, en Laredo vivió hasta los dieciocho años y al terminar la preparatoria se fue a Saltillo a estudiar medicina, fue allá donde conoció a su esposo Jesús Llanes, con quien desde hace siete años vivía en Monclova donde nacieron sus dos pequeños hijos.
“A mi cuñado lo conoció en Saltillo cuando estudiaban medicina, ella no terminó su carrera mi cuñado sí, ella era muy feliz, logró formar su familia”, dijo.
Amaba la Medicina
Miriam amaba mucho su profesión, desde muy chiquita siempre ayudaba a todos los que podía, incluso en Laredo era voluntaria de paramédico, por circunstancias de la vida no logró terminar su carrera de Medicina pero después ya siendo mamá por lo mismo que era su pasión estudió en Monclova lo de paramédico, era lo que a ella le gustaba hacer.
Trabajaba en la Cruz Roja donde a veces andaba en la ambulancia y otras de radio operadora, desde que se enteró de que el virus estaba en la ciudad, tomaba sus precauciones, sin embargo, no contó con que el Covid alcanzaría a su familia.
“Desde que sus suegros empezaron a sentirse mal, ella igual a los dos tres días también pero igual tenía que cuidar a su suegro, ella apoyó a mi cuñado en ese aspecto porque él estaba trabajando”, dijo Daniela.
Mencionó que su hermana comenzó con falta de aire, estuvo en su casa primero con tanque de oxígeno, le dio conjuntivitis, diarrea, le dieron muchos síntomas del Covid-19.
“Cuando ella supo la noticia del fallecimiento de su suegro el 21 de abril por la noche se alteró mucho y el día 22 de abril la internaron”, dijo Daniela, quien mencionó que a pesar de la distancia su hermana tenía un fuerte lazo con su familia y todos los días hablaba con sus papás.
“Inclusive un día antes de que se la llevaran a hospitalizar fue la última vez que hablamos con ella, lo último que le dijo a mi mamá fue; ‘yo no me quiero morir’”, recordó Daniela, que mencionó que su hermana quería luchar por sus hijos.
Después de que murió su suegro, la joven paramédico pasó 20 días hospitalizada, entubada en la Clínica 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social donde su esposo es médico.
“No sé si él la atendió directamente o si los internistas le decían a él, él nos mantenía informados pero él nos comenta que era muy difícil porque con todo su traje no podía estar hablando a cada ratito por los mismos cuidados”, dijo.
Miriam estuvo estable mucho tiempo, incluso cuando tenía como 15 días internada les informaron que ya la iban a desentubar, sin embargo, de repente el miércoles pasado les dijeron que la joven estaba muy grave, presentó complicaciones por asma, fue lo que hizo que perdiera la batalla.
“Nadie se imagina que puedan ocurrir estas cosas, hay mucha gente que no cree en el Covid, siente uno impotencia cuando ves a la gente haciendo sus reuniones y dices por qué le pasa a la gente que se está cuidando, que sigue sus protocolos de limpieza, de higiene, de todo y a esa gente que no respeta no les entra en la cabeza lo que puede pasar, Miriam seguía todas las recomendaciones por lo mismo que trabajaban en un lugar de riesgo porque estar en Cruz Roja o estar en el Seguro era un riesgo, no quieres llevar el virus a tu casa”, dijo.
“Desde que se supo del virus ella se comenzó a cuidar, se protegía, ella no salía, no hacían reuniones pero jamás pensó que le iba a pasar a ella, no hay palabras para describir lo que estamos pasando, esta impotencia de estar desde acá desde lejos de pensar que no la vamos a volver a ver, a despedirnos, a abrazarla, es muy triste”, comentó.
Daniela, su hermana y sus papás desde que se enteraron de que el virus había tocado a su familia se mantuvieron en oración tenían fe, estaban esperando un milagro pero el lunes a las 9 de la noche recibieron la llamada para darles la noticia de que Miriam falleció.
A Miriam la noche del mismo lunes la llevaron a las instalaciones de Bomberos donde fue despedida por sus compañeros.
“Tengo entendido que a mi cuñado le entregarán las cenizas porque así fue con el papá de él, nosotros esperamos que pase todo esto para ya sea que vayamos o que mi cuñado venga, aún no sabemos qué vamos a hacer porque por la contingencia no es posible que viajemos nosotros para allá ni él para acá”, dijo la mujer que la última vez que vio a su hermana fue en Navidad.
“Ella tenía muchos planes”, agregó Daniela que manifestó su preocupación por sus sobrinos chiquitos.
Con información de Zocalo