¿Por qué la Rosca de Reyes tiene tanto significado? Descubre qué representa cada parte
Este 6 de enero, el Día de Reyes marca una de las celebraciones más importantes en el calendario litúrgico católico: la Epifanía, también conocida como la manifestación de Jesucristo al mundo. La palabra “Epifanía” proviene del griego y se traduce como revelación o aparición, simbolizando el momento en que el Niño Jesús se muestra ante los pueblos paganos.
La festividad tiene un vínculo estrecho con la historia de los Tres Reyes Magos: Melchor, Gaspar y Baltasar, quienes, guiados por una estrella, hicieron un largo viaje desde Oriente para llegar a Jerusalén, adorar al Niño Jesús y ofrecerle regalos de gran valor: oro, incienso y mirra.
Una de las costumbres más representativas en México es la partición de la Rosca de Reyes en familia. Según la tradición católica, quien encuentre la figura del Niño Jesús en su rebanada se convierte en el padrino del Niño, y debe cumplir con la responsabilidad de ofrecer tamales y atole el 2 de febrero, en el Día de la Candelaria.
Sin embargo, ¿sabías que cada elemento dentro de la Rosca tiene un significado simbólico profundo? Aquí te explicamos lo que representa cada parte:
- Forma circular: La forma de la Rosca tiene un simbolismo religioso significativo, ya que representa el amor eterno de Dios, sin principio ni fin.
- Fruta seca cristalizada: Esta decoración simboliza las joyas incrustadas en la corona de los Reyes Magos, las cuales representan paz, amor y felicidad.
- Cuchillo para partir la Rosca: Este utensilio tiene un significado que recuerda el peligro que enfrentaba Jesús al ser perseguido por el rey Herodes.
- Figura del Niño Jesús: La pequeña figura dentro de la Rosca simboliza a Jesús, quien fue protegido por María y José de las amenazas de Herodes.
- Comer el pan: Este acto se relaciona con la comunión con Jesús, simbolizando la unión espiritual con el Salvador.
Finalmente, el Día de Reyes marca el fin de la temporada navideña en muchos países, especialmente en los de habla hispana, concluyendo así un período de celebraciones familiares y religiosas.
Fuente: El Imparcial