Celebran como lugar sagrado al humedal de María Eugenia
Félix Camas
San Cristóbal de Las Casas.- Integrantes de varias organizaciones sociales y ambientalistas realizaron la quinta celebración de lugar sagrado del humedal de montaña María Eugenia, ecosistema de importancia mundial por ser fuente de agua y vida para la cuidad, donde en conjunto pidieron la renuncia del Fiscal Ambiental de Chiapas, por no atender los temas de invasiones y daños a los humedales.
“La procuraduría y fiscalía ambiental de Chiapas no solo es omisa, sino que abiertamente se ve una complicidad con los delincuentes ambientales, el expediente ambiental de las invasiones a lado del manantial Navajuelos desapareció de los archivos de la Fiscalía ambiental; los casos no avanzan, pese a que existen guardias en donde levantar las denuncias”.
Asimismo, durante su pronunciamiento argumentaron que no están trabajando, “el colmo de los colmos cuando el gobierno federal decide actuar para detener en infraganti a los destructores y ecocidas, alguien les da el pitazo y ese día misteriosamente no aparece nada ni nadie en los terrenos rellenados de los humedales”.
Mencionaron que en los humedales de montaña de María Eugenia se encuentran desde hace más de 5 años en un proceso de resistencia a la devastación ambiental que venía desarrollando la constructora “Peje de Oro” con el relleno del humedal, el cual se encuentra inserto en el polígono internacional del sitio Ramsar, lo que obligó a las autoridades ambientales, y a la “clase política” a intervenir y suspender la obra.
“El día de hoy nos enteramos que la empresa ha puesto un amparo, en el que busca continuar con las obras, sin importarle que miles de personas se queden en un futuro sin agua, y consecuentemente con un futuro muy complicado. Los bosques del Valle de Jovel se encuentran bajo amenaza, los arboles ayudan a filtrar el agua al subsuelo y garantizan la permanencia de los mantos freáticos”.
Finalmente, aseguran que solo la participación decidida de los habitantes de colonias, barrios y rancherías podrá detener esta sed de despojo que se manifiesta cada vez con mayor crudeza. “Tenemos claro que la razón y la esperanza están de nuestra parte, el respeto de la naturaleza y la defensa de los bienes comunes forman parte de una visión de futuro, que hoy más que nunca en esta época de crisis se hace urgente rescatar y promover”.