¿Cuánto sol necesito para obtener la vitamina D que mi cuerpo necesita?
La vitamina D es esencial para nuestro bienestar, y hay dos formas principales de obtenerla: mediante la exposición a los rayos solares y el consumo de pescados azules. Sin embargo, la primera vía resulta considerablemente más eficaz que la segunda. ¿Cuánto tiempo al sol necesitas para aprovechar sus beneficios al máximo? Aquí te lo contamos.
La vitamina D desempeña un papel crucial en la absorción de calcio y fosfato en nuestro organismo, fundamentales para mantener huesos, dientes y músculos fuertes y sanos. Por ello, esta vitamina está estrechamente ligada a la salud muscular, siendo de especial interés para atletas que buscan optimizar su rendimiento mediante dietas y rutinas específicas para el crecimiento muscular.
Los beneficios de la exposición solar son diversos y van más allá de la síntesis de vitamina D:
- Aumento de la masa muscular.
- Reducción de la presión arterial.
- Refuerzo del sistema inmunológico.
- Menor incidencia de infecciones respiratorias.
- Descenso de los niveles de colesterol.
- Mejora de la hemoglobina en sangre.
- Beneficios cardiovasculares y respiratorios.
- Estimulación de la síntesis de vitamina D.
- Promoción de la liberación de serotonina en el cerebro.
¿Cuánto tiempo de exposición es necesario para mantener una salud óptima?
Para sintetizar la dosis diaria de vitamina D requerida por el cuerpo, bastan 20 minutos al día durante los meses de verano. Es importante que la exposición solar sea controlada y gradual, evitando prolongadas exposiciones que puedan resultar perjudiciales. Se recomienda exponerse varias veces al día por períodos cortos.
Es fundamental evitar las horas centrales del día, cuando los rayos solares son más intensos, especialmente entre las 12 p.m. y las 5 p.m. Durante el verano, se aconseja una exposición de 10 a 20 minutos, unas tres veces por semana, mientras que en invierno se requiere un poco más, con incrementos de 7 a 10 minutos para alcanzar la síntesis adecuada de vitamina D. Siempre se debe utilizar protector solar para prevenir quemaduras y daños cutáneos.
Por otro lado, si el objetivo es broncearse, se recomienda una exposición más corta pero más frecuente. Sin embargo, es crucial tener en cuenta que una exposición excesiva puede aumentar el riesgo de cáncer de piel.
Es importante destacar que las personas con mayor cantidad de melanina en su piel necesitan un tiempo de exposición solar más prolongado para producir vitamina D, por lo que el tiempo ideal puede variar según el tono de piel de cada individuo. Cualquier consulta sobre dieta o cuidado de la piel debe realizarse con un médico especializado.
Con información de informador.mx