En ceremonia tradicional, Eduardo Ramírez recibe la bendición para dirigir su gobierno con firmeza, certeza y sabiduría
Como parte del Festival Cultural y Gastronómico “El Mequé”, una celebración única que busca enaltecer la Chiapanequidad, el gobernador Eduardo Ramírez Aguilar participó en la ceremonia para pedir permiso a la madre tierra, donde recibió la bendición para dirigir su gobierno con firmeza, certeza y sabiduría.
Ataviado con la indumentaria tradicional de Zinacantán, Ramírez Aguilar se sumó a la danza de los mayordomos, los alférez y las autoridades tradicionales en este ritual lleno de color y misticismo, en el que se entrelazan costumbres que datan desde la época prehispánica.
Al concluir la ceremonia, desde el atrio de la Iglesia de San Lorenzo, el mandatario agradeció la bendición del santo patrono para este caminar que apenas comienza, y destacó su compromiso de trabajar coordinadamente con el Ayuntamiento de Zinacantán, así como con respeto a los usos y costumbres de este pueblo.
«Nunca más debe haber un Gobierno del Estado por un lado y un gobierno municipal por el otro, somos lo mismo, Chiapas nos duele a todos lo mismo, nos lastima lo mismo y nos fortalece caminar con todos, y con todas las comunidades», expresó al tiempo de hacer un llamado a las y los habitantes de los pueblos originarios a vivir en unidad y en armonía, y que en esta temporada decembrina persista un sentimiento de paz.
Finalmente, el gobernador anunció que pronto volverá a Zinacantán para dar banderazos de obras, además de asegurar que recorrerá no sólo la cabecera municipal sino todas las comunidades.